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| Orlando Chirinos (Maracaibo, 11 de septiembre de 1944 - Valencia, 13 de junio de 2021) |
Estimados Liponautas
Hoy tenemos el gusto de hacerles llegar una entrevista que Petruvska Simne le hizo al narrador Orlando Chirinos, donde la escritora tuvo que responder una pregunta:
Esta entrevista forma parte de una serie de entrevista que Petruvska Simne hizo y publicó en las páginas de El Diario de Caracas, acompañadas por los retratos fotográficos de los escritores entrevistados hechos por el fotógrafo Vasco Szinetar, en el "decenio de los noventa del pasado siglo". Todas las entrevistas fueron recopiladas en un libro que publicó la Fundación para la cultura urbana en el año 2005, titulado ¿Por qué escriben los escritores?
Esperamos disfruten de la entrada.
Atentamente
La Gerencia
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¿Por qué escribo? Yo también me lo pregunto: ¿por qué carajos insisto con esto de rayar papeles?
Me atrevería a decir que por amor al arte, porque uno es un pendejo a tiempo completo, que todavía (felizmente) anda creyendo en poéticos pajaritos preñados. ¿Que otra cosa se puede pensar acerca de alguien que continúa dándose cabezazos contra la rosquera ( de roscas) pared literaria de este país y que sigue dalquedale de las ( buenas y malas, sobre todo estas, que son las mejores) palabras, después de que le ocurren episodios como estos?
Usted gana una mentada en un prestigioso concurso internacional de cuentos ( el Juan Rulfo, en París, Francia) donde han el director de un afamado suplemento literario nacional le dice que ese texto es "demasiado largo" para publicarlo en "su" periódico (¿Habrá sido Luis Alberto Crespo y el Papel Literario del Nacional? ). Días más tarde, usted consigue (sin una coma o un punto menos) el cuento ganador (de alguien foraneo), mucho más extenso que el suyo ¡Que viva la literatura nacional! Por eso es que me cuajo de la más naturalista risa, cada vez que alguien viene por ahí con el cuento fantástico de la autoestima y de la falta de interes de los escritores venezolanos en su propia promoción (¡bien lejos!) en el exterior y otras pamplinas parecidas (y la inmensa mayoría de nuestros agregados "culturales", bien, siempre bien, gracias):
En otra oportunidad usted se hace acreedor de un respetable concurso nacional, con mucho abolengo, pues, y le avisan que (¡nada más y nada menos!) va a asistir el Ciudadano Presidente de la República, para entregar los galardones en la señorial Plaza Bolívar de Caracas. Usted, pecando de incauto, como siempre, invierte el poco dinero que tiene, y hasta quita otro tanto en calidad de préstamo (aparte de haberse endeudado celebrando el premio), para comprarse unos trapos a la altura de "tan magno y municipal acontecimiento". Una mano peluda altera la hora, a usted no le avisan, y cuando llega, el acto ¡uf! hace como dos horas que terminó, le dice un respetable señor, mientras lanza arroz a las palomas (de las que vuelan). Ni Presidente ni cámaras ni carajitas a las que usted les iba a lucir la esplendorosa "pinta". Usted se queda como novia de pueblo: vstido, alborotado y con muchas ganas... de matar a alguien, de torcer algún cuello.
Otro día, una ditorial, en la capital dela República, invita a una presentación de libros, correspondientes a diversos autores (dentro de los cuales, ¡afortunado!, está usted), y usted se entera (apenas dos horas antes) por los diarios, y se sube a un autobús provinciano y arriba, sin aliento, al venerable sitio del acto, pero (¡oh!, sorpresa) los libros reciben las oscuras aguas de una gaseosa transnacional. (Porque se robaron -¿...?- el ron, le dice como excusa, un sonrosado efebo, de mirada lánguida, delicados modales y displicentes gestos.) Telón, con arrechera municipal.
Más acá, una afamada editorial (¿Sería la editorial Planeta?) le publica a usted un libro y usted, a través de amigos solidarios, y todavía ejercitándose en aquelo de andar creyendo en pajaritos etcétera, organiza un plan de presentaciones, que cubre varias ciudades importantes del país, y logra conseguir buenos locales, el brindis, el presentador, la cobertura de prensa, pero (¡oh! malhadada fortuna) el gerente, el factotúm prácticamente, lo manda a la mismísima, cuando a través de interpuesta persona (su secretaria), le participa que, si usted quiere presentar "su" libro (suyo de usted), tendrá que comprar los ejemplares necesarios, para hacérselos llegar al presentador y los periodistas.
Más allá, un periodista "cultural" (¡por mi madre que no merecía ser llamado así, desprestigiando a tantos que sí lo son, y muy buenos!), lo convoca para entrevistarlo a proposito de una novela suya de usted. Pero, tú sabes, chico, no he tenido tiempo de leérmela en stos treinta días. Resultado: a usted le queda una agritud en la boca, depués de haber oído y hablado tantas pendejadas juntas. Telón, con arrechera nacional.
Dígame usted, si tras todo eso uno sigue con el ruquirruqui de escribir ¿no es cuestión de ser pendejo, sin día de parada?
Finalmente: ninguna de las editoriales quehan publicado alguno de los libros que he escrito hasta ahora, han hecho más por mí, en el terreno de la promoción, que la gente de la DISIP. en los días en los cuales estuve detenido, tras la rebelión del 27 de noviembre de 1992 (un intento de golpe de estado para derribar un gobierno elegido de forma democrática), logré mucha más publicidad que en todos los años/libros anteriores. Lo que sucede es que a ese precio ¡ni de vaina, hermano, ni de vaina!
P.S.: En lo particular, no tengo nada contra las roscas, mi gran frustación es porque no me dejan entrar en alguna.
El Diario de Caracas, 6 de marzo de 1995
27N de 1992, el asalto a VTV por Jesse Chacón
Escritor. Profesor de literatura en la Universidad de Carabobo.
Ha publicado: en narrativa: Última hora en la piel, 1979; Oculta memoria del ángel, 1985; En virtud de los favores recibidos, 1987; Imagen de la bestia, 1993; Mercurio y otros metales, 1997; Parte de guerra, 1998.
Recibió el Premio de Narrativa de la Universidad de Carabobo; Premio del Concurso Anual de Cuentos del diario el Nacional, 1983; finalista del Concurso Internacional de Cuentos Juan Rulfo, 1987.

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Petruvska Simne. Articulista y narradora. Trabajó como coordinadora de la edición 61 Aniversario del diario Últimas Noticias, en la revista de poesía Circunvalación del Sur, en publicaciones del XI Festival Internacional de Teatro de Caracas, así como en el suplemento cultural EI Otro Cuerpo, de El Ateneo de Caracas, encartado en El Nacional; y en las revistas BCV Cultural, La Palabra Pintada...
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Vasco Szinetar retratado por Diana López.
Fotográfo con estudios superiores de cine en la Escuela León Schiller de Lodz (Polonia) y en la International Film School (Londres).
Ha participado en innumerables exposiciones colectivas en ciudades como La Habana, Barcelona (España), Houston, Bogotá y Caracas.
Ha publicado libros de fotografía como Sesenta retratos (1987), Re-tratados: España 1974-2003 (2004), Periodistas (2010). Fue el curador de los libros Fotografía urbana venezolana 1850-2009 (2009) y 70 años de fotoperiodismo en Venezuela (2011).
https://cultura-urbana.com/autores/vasco-szinetar/
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