Estimados Amigos
Hoy compartimos con ustedes esta crónica que gentilmente nuestro amigo José Carlos de Nóbrega nos cedió para ser publicada en este navío digital. El texto que leerán a continuación es un reclamo frente a las pésimas gestiones culturales que se suceden, al parecer sin cesar nunca, en nuestro pequeño burgo Valencia. Es lamentable que en una ciudad donde hacen vida escritores, artistas y científicos de innegable calidad, aún se deba sufrir el peso muerto de una burocracia inefectiva que vive solo para recibir sus 30 monedas de plata cada quince y último de mes.
Esperemos que esta entrada sirva para movilizar conciencias pero por ahora solo nos queda soñar que alguna vez la burocracia cultural local funcione por lo menos a un cuarto de su capacidad.
Podríamos terminar con la despedida usual de este blog: Deseamos disfruten la entrada, pero hoy el mensaje sera enviado de forma individual a cada Liponauta con un homenaje a Fredric Brown. Así que nos despedimos con esta invitación:
Richard Montenegro
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EL DESIERTO EDITORIAL EN CARABOBO
“Conservador.
Hombre de Estado al que los males presentes le encantan y que por tanto difiere
del liberal, quien desea sustituirlos por otros diferentes”.
Ambrose Bierce:
Diccionario del Diablo.
Fuimos invitados, sin saber a ciencia
cierta por qué, a una reunión en la sede de la Secretaría de Cultura de la
Gobernación del estado Carabobo, ubicada en el adefesio arquitectónico llamado
“Museo de la Cultura”. La agenda de tan inusual cónclave, que se realizó el mièrcoles 2 de septiempre de 2015, se centraba en un
censo de escritores, la política editorial estadal y la seguridad social de los
cultores literarios.
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Ambrose Bierce |
La reunión, además de un bajo y poco
significativo quórum –lo cual apunta a una frágil convocatoria-, se inició con
una hora de retraso. El presídium estuvo integrado por especialistas jurídicos
y una pléyade de funcionarios con cargos rimbombantes: los abogados Johnny
Pérez, Jesús Villegas, Pedro Cabrera y las directoras ejecutiva y de Desarrollo
Humano de la Secretaría de Cultura, Mónica Valencia y Chemir Colina.
Repentinamente, surgió un tema fuera de la agenda en la convocatoria: el Plan
Nacional de los Derechos Humanos. Los abogados ductores realizaron una
exposición general sobre los derechos culturales de los venezolanos, haciendo
referencia a la Constitución, la Ley Orgánica de Cultura y otros instrumentos
jurídicos relacionados con el tema. Observamos con desconcierto que el discurso
estéril del panel exaltaba, en una perniciosa lectura de solapa, a los
colectivos [organizaciones sociales de vital importancia] para despreciar lo
individual [una cosa es individuo y otra individualismo]. Nos quedamos con
ciertas voces solitarias y aguafiestas, como Ambrose Bierce y Domingo Alberto
Rangel, pues nos previenen acerca de las manipulaciones demagógicas de
politicastros y burócratas de medio pelo.
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Domingo Alberto Rangel |
Lo que más nos indignó, fue el discurso y
la praxis del funcionarismo que se enseñoreó de este lamentable encuentro. Por
ejemplo, la seguridad social no es una contraprestación para los ciudadanos, se
convierte en un valor de cambio para mantener a funcionarios indolentes en sus
puestos, en otras palabras, la intermediación burocrática es un dique oscuro
que contiene los procesos de cambio. Incluso, se estaba ponderando las bondades
de los contratos de seguros privados, como si se tratase de una sesión de
ventas de Dianética o Tupperware. Esa gran masa de dinero que va a la banca y
las aseguradoras, debería destinarse para fortalecer el sistema nacional de salud.
Desde el punto de vista político, los funcionarios apostaron entre líneas por
la representatividad a expensas de la democracia participativa. Es la
reivindicación del claustro en donde pocos transan nuestra calidad de vida con
fines inconfesables.
Respecto
a la política editorial de la Secretaría de Cultura, aduciendo la crisis del
papel en el país, la Directora Ejecutiva y de Publicaciones desterró del estado
Carabobo la publicación de libros en físico. Nos parece que esta grey de
burócratas considera que se ahorran costos por partida doble: no publicándolos
para no quemarlos en la pira funeraria del arte literario local. Se sacrifican
dos pájaros en un solo holocausto. Propuso la publicación digital de los
títulos, sin hacer referencia a ningún tipo de detalles que le escamotearan el
almuerzo (la funcionaria apeló al estribillo para cantar una pavosa elegía:
¡apuren pues las propuestas, que ya son las doce!). Por supuesto, los libros
serán sometidos a un Tribunal encapuchado [o, peor aún, encapillado] bajo el
eufemismo del arbitraje. La estulticia y mediocridad del discurso inculpó a los
cultores de la precaria promoción de las artes en Valencia de San Simeón el
estilita: sus desencuentros y egos importunan de nuevo el almuerzo y la siesta
de funcionarios tan abnegados. Es un anatema publicar la obra completa de
Vicente Gerbasi, José Rafael Pocaterra, Teófilo Tortolero, Ida Gramko o Tomasa
Ochoa, entre otros, según esta nueva resolución de provincias.
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Tomasa Ochoa |
Reiteramos, pues, que esta Secretaría arroje
la máscara y acompañe a las autoridades universitarias al centro comercial Sambil, pues esta
locación es la más adecuada a su despropósito mercantil. Dejen que los
escritores hagamos justicia poética por nuestra propia cuenta.
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José Carlos De Nóbrega. Ensayista y narrador venezolano (Caracas, 1964 - Valencia, 2023). Licenciado en educación, mención lengua y literatura, de la Universidad de Carabobo (UC). Forma parte de la redacción de la revista Poesía, auspiciada por la misma casa de estudios. En 2007 su blog Salmos compulsivos obtuvo el Premio Nacional del Libro a la mejor página web.
En 2015, fue profesor invitado por la Universidad de Salamanca para dictar un curso sobre literatura venezolana, auspiciado por la Cátedra Ramos Sucre de la USAL y el CENAL.
Ha publicado dos volúmenes de ensayo: Sucre, una lectura posible (Universidad de Carabobo) y Textos de la Prisa (Gobernación del estado Carabobo) en 1996. Los libros de ensayos Derivando a Valencia a la Deriva (2007) y Salmos Compulsivos por la Ciudad (2008, versión digital en www.letralia.com) han sido publicados por las editoriales “El Perro y la Rana” y “Letralia” respectivamente. En mayo de 2008, la Editorial Letralia publicó Para machucar mi corazón: Una antología poética de Brasil (serie Transletralia, versión digital en www.letralia.com), de la cual es el compilador y el traductor. En 2011 apareció el libro de ensayos Salmos Compulsivos, bajo el sello editorial Protagoni, c.a..
El Fondo Editorial Fundarte publicó el libro de cuentos El Dragón Lusitano y otros relatos, en 2013. En 2014,
Fundarte hizo públicas dos traducciones a saber: los libros de poesía Las imaginaciones / El soldado raso. de Ledo Ivo y la novela La Pasión según G.H., de Clarice Lispector. También tradujo Dispersión / Indicios de Oro, del poeta portugués Mário de Sá Carneiro.
Ha colaborado en diversas publicaciones periódicas: Poesía, La Tuna de Oro, Tiempo Universitario, Letra Inversa del diario Notitarde, Laberinto de Papel, Revista Nacional de Cultura, Imagen, suplemento Letras del diario Ciudad Ccs, el diario Vea y Fauna Urbana.
Richard Montenegro. Perteneció a la redacción de las revistas Nostromo y Ojos de perro azul; también fue parte de la plantilla de la revista universitaria de cultura Zona Tórrida de la Universidad de Carabobo. Es colaborador del blog del Grupo Li Po: http://grupolipo.blogspot.com/. Es autor del libro 13 fábulas y otros relatos, publicado por la editorial El Perro y la Rana en 2007 y 2008; es coautor de Antología terrorista del Grupo Li Po publicada por la misma editorial en 2008 y en 2014 del ebook Mundos: Dos años de Ficción Científica editado por el Portal Ficción Científica. Sus crónicas y relatos han aparecido en publicaciones periódicas venezolanas tales como: el semanario Tiempo Universitario de la Universidad de Carabobo, la revista Letra Inversa del diario Notitarde, El Venezolano, Diario de Guayana; en las revistas electrónicas hispanas Alfa Eridiani, Valinor y Gibralfaro, Revista de Creación Literaria y de Humanidades de la Universidad de Málaga y en portales o páginas web como la española Ficción Científica, la venezolana-argentina Escribarte y la colombiana Cosmocápsula.
Pocos somos los que leemos en digital, a veces lo hago por necesidad y no por gusto. Siempre, siempre preferiré un libro impreso, para goce y disfrute.
ResponderEliminarQué idea, la de los "ideotas" proponer publicar sólo en digital.
Happy