CRÓNICAS DEL OLVIDO
Memoria de los pecados, de José Pulido
Alberto Hernández lunes 30 de octubre de 2023
1
Esta es la novela de un país. De la memoria de un país. Es la historia de un país cuyo mapa está lleno de saltos: un país de hombres y mujeres que vivieron una dictadura y fueron protagonistas de sus soledades, de sus vidas y de sus muertes, de sus instintos caseros, de sus fluctuaciones afectivas.
José Pulido nos entrega una novela en la que el lector podrá verse instalado durante la dictadura de Marcos Pérez Jiménez. También en buena parte del período democrático. Es decir, es la historia macro mientras ocurren anécdotas y sucesos familiares, y es también la biografía íntima de unos personajes que son víctimas, unos, de los desmanes de la tiranía, otros, sujetos a sus pecados “comerciales” desde la prostitución hasta el encargo matarife que encajonó a Venezuela durante casi una década.
Marcos Pérez Jiménez |
Es también una lectura en la que cada sujeto explaya sus conocimientos, sus más escondidos recuerdos, sus revelaciones. Es la historia de un país, sí, pero es también la historia de lo que no ocurre, puesto que muchos de los actantes sueñan, se consuelan con saber que son sólo personajes que se mueven conducidos por las circunstancias.
Memoria de los pecados, de José Pulido (Barralibros, 2023). Disponible en Amazon |
2
Una familia de la provincia con parientes en la capital. Una familia con un hijo, Cintio Alejo, que quiere estudiar Derecho en Caracas y necesita instalarse en la casa de un tío, Cleófanes, que es abogado. Es una familia que se ve conmocionada por la llegada de un pariente cercano que estaba “perdido”, quien arriba rico a la casa. Se porfiaba que se había enriquecido a fuerza de trabajo honesto, pero el hombre estaba involucrado en turbios negocios como el de la prostitución en contubernio con su mujer, una francesa, que formaba parte de una mafia. Celestino Caravallo, el familiar rico recién aparecido, es secuestrado por la Seguridad Nacional (SN), no por cuestiones políticas sino porque le estorbaba a la misma mujer y a sus cómplices en el negocio de la putería, razón por la cual le pusieron una trampa y lo mandaron a matar con los esbirros de Pedro Estrada.
Después de la muerte del personaje se desarrollan otros pecados que tienen que ver con el libertinaje, las traiciones, el sufrimiento ocasionado por otros actantes reales o ficticios.
Las mujeres de esta novela son las mujeres de la Venezuela de siempre: trabajadoras en su casa, bondadosas, amantes de sus hijos y esposos, alocadas algunas.
Pulido se vale de segmentos de la historia cultural universal para fortalecer el carácter de algunos de los personajes. Va y viene en el tiempo narrativo y se vale de espacios entre paréntesis para albergar los pensamientos de un narrador incluyente, como una suerte de inventario que alimenta el resto de la narración.
Los personajes recorren estas historias en medio de los diferentes avatares de sus vidas, las públicas y las privadas.
Las mujeres: Carmucha, Margot, Jeanne Pergoud (la francesa, “el cuero de Celestino”), Genara y Eufemia, Carmela y Brunela (las primas de Cintio, las eróticas fornicadoras quienes lo iniciaron en los sudores de la cama), doña Asuncia, Bartolina (la secretaria del abogado Cleófanes), Filomena (la esposa de Cintio Alejo), Olivia (la pareja erótica de la francesa), Filomena Voltaira, Teotiste, Sulany, Solentiname, Blanca Rosa… Cada una representa una suerte de fenotipo de la mujer que compone este mapa anímico y social de Venezuela.
Los hombres: Cintio Zenobio, padre de Cintio Alejo; Celestino, “la oveja negra de la familia”, el tío Cleófanes, el señor García (el de la carpintería), Gil Barbascue, alias Pan de Avena, el coronel Grillet, agregado militar francés; Marcus Devereaux, alias La Hiena, cómplice de la francesa; el doctor Alecio Murtimia, médico de la Seguridad Nacional; el subjefe (SN), el funcionario, Jordi. Los jefes de la SN Pedro Estrada, Oscar Tamayo Suárez, coronel de la Guardia Nacional, Miguel Silvio Sanz, la actriz amante de éste (Zoe Ducós, cuyo nombre no es mencionado).
Los referentes literarios, históricos y culturales: Maupassant, Gustave Flaubert, Casanova, Salgari, Simone de Beauvoir, Sartre, Borges, Pitágoras, Hermes, Marco Polo, el Concilio de Trento, el Dalai Lama, Lutero, Buda, etc.
Todos ellos conforman un tejido de voces que le dan cuerpo a esta historia que José Pulido convirtió en una novela, en un universo de “pecados”, de transgresiones, de secretos, de tentaciones.
3
Nuestro autor juega a placer con el tiempo. Se desplaza de una época a otra sin ninguna dificultad. A veces deja en blanco al lector: propicia extensas pausas para más adelante retomar la historia. Podría pensarse que quedan relatos sueltos, pero la idea —considera este cronista— es que el lector los complete con su imaginación. Una novela —Kafka es un ejemplo— no es una totalidad. Se forma con segmentos, con trozos de existencia, con relatos que a la larga podrían formar otras aventuras narrativas.
Memoria de los pecados, publicada por Barralibros Editores, es, precisamente, una lista de pecados que se confirman en nombres propios, en la osadía de cada personaje por sobresalir, por hacerse de protagonismo: cada actante es una isla que crece en la medida en que el narrador lo deja libre, cuando le permite ser en medio de los “pecados” que alimentan la obra.
Una vez más: esta es la novela de un país que arranca en la década de los cincuenta y termina en la de los noventa del siglo pasado. Es la biografía de un país en el que todo lo que se ha dicho en ella es el reflejo de una realidad que tiende a repetirse o está repitiéndose.
Tomada de Letralia
José Pulido. Fotografía de Gabriela Pulido Simne |
No hay comentarios:
Publicar un comentario