“Nota y poesía” se titulaba la columna
periodística que durante años mantuvo el poeta valenciano Gerardo
González Vásquez (1936-1973) en el diario El Carabobeño. Lo conocí a
finales de los sesenta en la parroquia La Pastora y fue mi primer editor
en ese espacio informativo donde publiqué, corregidos por él, un par de
textos germinales. Frecuentaba el bar “El Mamón” en la esquina sureste
de la avenida Anzoátegui con la calle Vargas, próximo a la casa que fue
del pintor Oswaldo Vigas y a una cuadra de donde nació Víctor Racamonde.
Cercano aquel lugar a la “Esquina del Zamuro” -frente al parque público
Carlos Sanda-, donde vivía Enrique Grooscors (h), amigo y mentor del
poeta a quien Gerardo González le dejara dedicado, junto a Humberto
Martínez Mainardi: “Poema del abandono delirante y la vigilia”, que se
publica póstumamente en el Nº 10 (1978) de la otrora, Zona Tórrida.
Revista de Cultura de la Universidad de Carabobo.
Veía
llegar al poeta a media mañana al bar en un autobús de la línea
Mataderos donde mansamente permanecía bebiendo cerveza con sorbete,
hasta media tarde. Vestía casi siempre de corbata y chaqueta a la manera
de aquellos viejos de antes que no salían a la calle ni recibían visita
“en mangas de camisa”. De forma invariable, leía y trabajaba sus poemas
y otras escrituras desde la madrugada en su casa materna en el sector
Los Sauces por la avenida Bolívar norte al lado del “Mayantigo”, arepera
de unos canarios palmeros que hacía esquina con el bar California, del
portugués Manuel, por el callejón Prebo. Lugar que por cierto no
frecuentaba Gerardo, pienso, por la misma cercanía al lindero familiar.
“Cristal
de rebeldía” y “En el alba de mi plectro”, son poemarios de corte
romántico que junto a otros textos similares, después de más de cuarenta
años de fallecido su autor, permanecen inéditos. En 1978, Separata,
órgano del Departamento de Literatura de la Dirección de Cultura de
la UC, le dedica una “colactánea” junto a poemas de Víctor Racamonde
(un poeta de otro tiempo, pero de similar estirpe a la de él). Esta
edición fue diagramada por Wladimir Zabaleta y estuvo bajo la dirección
de Reynaldo Pérez Só. El poema dedicado a Miguel Soufront, que abre la
muestra, es notable.
La muerte nocturna:
“La
muerte tiembla cuando yo despierto / y se acobarda de su propio engaño /
La he vencido en el alba. Su rebaño / de sombra fue un carámbano en mi
huerto. //
Muy lejos de la noche, me
convierto / en la última pirámide del año. / Y entibian mis aristas el
extraño / sol que alumbra en un místico desierto. //
La muerte me acompaña mientras duermo / con el dolor de su esqueleto enfermo / pero en fracaso su misión concluye, //
porque mi cuerpo, sin mortal herida, / en nocturno combate por la vida / la cansa, la derrota y la destruye…”
De
hablar pausado, urbano, y voz sonora pero nunca altisonante, Gerardo
fue desde muchacho un extraordinario declamador. “Yo nací para decir o
recitar versos, es cuestión que se lleva en la profundidad del ser”, le
declara a la prensa en ocasión de un recital que se realizó en el marco
de la celebración del Cuatricentenario de Valencia. Hay imágenes
imborrables que conservo de él. Una es la fotografía que publicó la
revista “Zona Tórrida” donde aparece vestido de soldado con un rifle
máuser en las manos y una bayoneta en la cintura. Es una expresión tan
extraña para quien lo conoció. En la otra, lo veo recitando el poema de
Porfirio Barbas Jacob Canción de la vida profunda, y tomando luego el
bus de regreso en la parada de la avenida Soublette, soñando quizás con
su orquídea y el río Sena que anheló tanto y nunca vio.
Tomado de NotiTarde
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Luis Alberto Angulo (Barinitas -Estado Barinas, 1950). Los libros "La sombra de una mano" (Monte Ávila Editores, Colección Altazor. Caracas, 2005), y "Fusión poética" (Universidad de Carabobo, Valencia - Venezuela, 2000), recogen cinco de sus poemarios publicados a partir de 1982. Premio del IV Concurso Internacional Poesía UC, por "Antípodas" (1994). Premio de la Bienal de Poesía del Ateneo de Calabozo Dr. Francisco Lazo Martí, por "Fractal". Premio de Poesía Universidad Rómulo Gallegos por "De Norte a sur". Es coautor de "Viento barinés" (UC, 1978), "Rostro y poesía" (UC, 1996), "Setenta poetas venezolanos en solidaridad con Palestina, Iraq y Líbano" (Minci, 1977), y antólogo de "Poemas de San Juan de la Cruz" (Cuadernos Cardinal, UC 1992), Poemas de Miguel Hernández (El perro y la rana, 2006), "Antología poética de Ernesto Cardenal" (Monte Ávila, 2005).
Co-fundador de la Red Nacional de Escritores. Director de la revista Redve (2005).
Miembro de la Comisión Rectoral fundadora del Encuentro Internacional Poesía UC
Co-fundador de la Red Nacional de Escritores. Director de la revista Redve (2005).
¡Qué poema! ¡Qué poema el de Gerardo González! ¡Y uno se cree...! dice Serrat. Y, como para rematar, esa excepente gráfica del Mayantihg.
ResponderEliminarGracias por leernos Pedro. Bienvenido al blog. Disculpa la tardanza en responderte.
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