Murió Josep Maria Berenguer, fundador de 'El Víbora'

Berenguer (a la derecha), junto a Dominique Burdot, en 2010. | Christian Maury

Luis Alemany | Madrid


 24/04/2012

Josep Maria Berenguer, fundador de la revista 'El Víbora' y personaje clave en el mundo del cómic en España, murió el 23 de abril en Barcelona, después de meses de enfermedad.

"Él sabía que, de su generación, él era un superviviente, un testigo, porque muchos de sus compañeros se quedaron en los años 70 y 90. Sabía que era un hombre afortunado, que pudo hacer la vida que le dio la gana y eso le permitió afrontar la muerte de una manera admirable, con tranquilidad y con satisfacción".

El escritor Hernán Migoya, colaborador íntimo de Berenguer durante ocho años, recordaba esta mañana al verdadero autor "de la gran publicación del cómic no sé si 'underground' o independiente o las dos cosas que hemos tenido en España.

Berenguer tuvo la habilidad de llevar el entusiasmo contracultuRal de la Barcelona de los años 70 al terreno del cómic, con la guía de su 'maestro', Josep Toutain. En el Salón del Cómic de Getxo de 2010, Berenguer narró aquella aventura en una charla transcrita después por la web Entrecomics: "En Barcelona conocí a Nazario, a [Miguel] Gallardo y [Juanito] Mediavilla, a Max... Y conocí a gente de El Rrollo. Y empezamos a tener reuniones en La Floresta, en un chiringuito que se llamaba La Casa Blava, que ya no existe, donde hacían unas paellas buenísimas. Y nos pasábamos días allí comiendo paella y discutiendo, hablando de quién haría un personaje, quién haría política, quién haría... no sé, Nazario con los travestis de las Ramblas, Gallardo y Mediavilla con los delincuentes de los barrios periféricos, Max con su lucha contra las multinacionales, [Alfredo] Pons hablando de la juventud descarriada y de las putas...".

El trabajo de Berenguer se desarrolló dentro de Ediciones La Cúpula, el sello que fundó en 1979 con la aparición del primer número de 'El Víbora', y que, después, dio nuevos frutos como la revista de cómic erótico 'Kiss'. Esta misma tarde, los responsables de La Cúpula han lanzado una nota de condolencia por quien aún era su director. Su texto amplia el retrato del fallecido: "Berenguer estudió Bellas Artes y en los años 60 y 70 se ganaba la vida como fotógrafo e ilustrador freelance, además de participar en algunas exposiciones de pintura y de fotografía y de diseñar y construir lo que él llamaba 'cúpulas geodésicas'. Gracias a sus diversos viajes por Estados Unidos, conocía de primera mano la cultura underground, tanto los 'comix' como la literatura de Jack Kerouac o Allen Grinsberg. A finales de los años 70, se cruzó con el editor de cómics Josep Toutain; ambos vivían en La Floresta (Barcelona) y colaboraban en el boletín de la asociación de vecinos de esta localidad, titulado 'El enterao'; Toutain escribía, Berenguer ilustraba. Cuando Berenguer le explicó a Toutain que quería fundar una revista de artes visuales, hablando de pintura, ilustración, cine, fotografía y cómics, éste le respondió que le dejaba el dinero si editaba una revista de historietas. Y así lo hizo".

El Mundo